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Estimación causal de la tesorería

Una alternativa a los modelos univariantes

La estimación univariante es muy frecuente porque no impone especiales restricciones en términos de hipótesis, y tampoco resulta costosa en términos de tiempo y cálculos.

Los pronósticos así obtenidos respetan las tendencias observadas en el pasado y en caso necesario también pueden corregirse para reflejar cambios estructurales; sin embargo, son en cierto sentido independientes: por ejemplo, cuando proyectamos las existencias lo hacemos en función de su serie histórica, pero muy probablemente la cuantía de los inventarios está relacionada con el volumen de negocio, la cuantía de las compras, los períodos medios de fabricación y almacenamiento, etc.

Esto plantea una dicotomía entre la calidad de los pronósticos y la complejidad del método de trabajo. Estimar a partir de las variables explicativas ofrece en general resultados de más calidad, pero también exige un esfuerzo analítico más intenso y da lugar a problemas adicionales, como la cuantificación del efecto relativo de cada una de esas variables explicativas y el control de los sesgos causados por la colinealidad.

Una solución intermedia es elegir una variable que presumiblemente explique una buena parte de las magnitudes económicas y financieras, y formular los estados previsionales a partir de ella; la condición necesaria es que esta variable tenga una capacidad explicativa estadísticamente comprobable.

De forma complementaria, podemos incluir otros criterios de pronóstico siempre y cuando la complejidad no haga que el modelo resulte inmanejable. Por ejemplo, podemos proyectar los créditos comerciales como una proporción de las compras (asumiendo por tanto que el período de pago va a ser aproximadamente estable), o las amortizaciones como una función del activo fijo y de la depreciación anual media registrada en el pasado.

Finalmente comprobaremos que los resultados sean razonables, es decir, que se correspondan con el perfil económico y financiero de la empresa.

Estados contables previsionales a partir de una estimación de ventas

La tabla inferior muestra los estados contables previsionales de la empresa, formulados a partir de estimaciones para las ventas. La facturación se estima mediante un pronóstico univariante, y las restantes magnitudes patrimoniales y de explotación se proyectan con base en ratios y relaciones de lógica financiera, a partir de esas cifras de ventas.

  • Activo total: se proyecta como función de las ventas, ya que la ratio de rotación es bastante estable y la regresión del activo sobre la facturación (A = -82,55 + 1,1182 · V) ajusta casi perfectamente los datos.
  • Activo fijo: se calcula en función del activo total previsto y de la proporción que el inmovilizado ha venido representando en él entre 2014 y 2017 (84,77%)
  • Tesorería: a partir de su cuantía media en el conjunto del activo (11,30% entre 2014 y 2017)
  • Existencias: su evolución en el pasado no se ha ajustado a la cifra de ventas, de manera que esa no parece una opción adecuada para pronosticar. Sin embargo sí ha venido representando una proporción muy estable del activo, de manera que se estima a partir de esa ratio.
  • Cuentas a cobrar: siguen muy fielmente el comportamiento de la cifra de ventas (V) de acuerdo con el siguiente modelo: CC = -23,62 + 0,1073 · V (R2 = 0,93). Para 2017 se estima CC2017-23,62 + 0,1073 · V2017-23,62 + 0,1073 · 475 = 27,34.
  • Otros circulantes: esta partida tiene una naturaleza indeterminada, se estima por diferencias entre la cifra total de circulantes y la suma de las tres partidas anteriores.
  • Recursos propios: la cuantía del año anterior menos los dividendos pagados y más el resultado neto del ejercicio en curso.
  • Cuentas a pagar a proveedores: como proporción de los gastos de explotación (a partir de la ratio histórica media, que es 18,49%).
  • Deuda a largo plazo: debe proporcionar la financiación que no pueda ser obtenida a través del crédito de proveedores ni esté disponible en forma de recurso propio, de manera que se calcula como la diferencia entre los recursos propios y la financiación comercial, por una parte, y el activo total por otra. 
  • Gastos de explotación: como proporción de la facturación y considerando el coeficiente medio de explotación en 2014-17 (0,75)
  • Amortizaciones: aplicando la tasa media de depreciación al inmovilizado previsto (12%)
  • Intereses: asumiendo que las cuentas a pagar con proveedores tendrán presumiblemente coste implícito (estará incorporado al precio de adquisición de los recursos, servicios y materiales), los gastos financieros tendrán su origen fundamentalmente con la deuda a largo plazo; se pronostican a partir de los valores previstos para ésta. Aquí se podrían incorporar elementos adicionales de control, como variables expresivas del interés de mercado e incluso también alguna corrección para reflejar el riesgo financiero, que presumiblemente crecerá paralelamente al apalancamiento.
  • Impuestos: aplicando el beneficio antes de impuestos la tasa impositiva media, la cual se ha calculado a partir del impuesto devengado (no hay información sobre la imposición efectiva)
  • Dividendos: aplicando el pay out medio de 2014 - 2017 (25,15%) al beneficio neto proyectado.
  2014 2015 2016 2017 2018 2019 2020
Activo fijo 250,00 280,00 350,00 400,00 463,57 520,99 578,42
Circulante 30,00 50,00 70,00 80,00 83,30 93,62 103,93
Tesorería 2,00 5,00 10,00 9,00 9,42 10,58 11,75
Existencias 6,00 17,00 25,00 21,00 24,99 28,08 31,18
Cuentas a cobrar 7,00 13,00 17,00 23,00 27,34 32,27 37,21
Otros 15,00 15,00 18,00 27,00 21,56 22,68 23,80
Total activo 280,00 330,00 420,00 480,00 546,86 614,61 682,35
RRPP 210,00 240,00 283,00 331,00 364,93 405,58 448,77
Deuda 70,00 90,00 137,00 149,00 181,93 209,03 233,58
Proveedores 45,00 40,00 50,00 63,00 65,53 71,88 78,22
Deuda a l/p 25,00 50,00 87,00 86,00 116,40 137,15 155,36
Ventas 300,00 320,00 390,00 430,00 475,00 521,00 567,00
Gastos explotación 237,00 236,00 280,00 318,00 354,47 388,79 423,12
Amortizaciones 31,00 37,00 44,00 42,00 56,42 63,41 70,40
BAIT 32,00 47,00 66,00 70,00 64,11 68,79 73,48
Intereses 2,00 3,00 5,00 4,00 5,72 6,57 7,32
BAT 30,00 44,00 61,00 66,00 58,39 62,22 66,16
Impuestos 5,00 7,00 9,00 7,00 8,46 9,01 9,58
BN 25,00 37,00 52,00 59,00 49,93 53,21 56,58
Dividendos 7,00 9,00 11,00 16,00 12,56 13,38 14,23
Reservas 18,00 28,00 41,00 43,00 37,37 39,83 42,35

Proyección de la tesorería (causal)

Partiendo de los estados previsionales así calculados, podemos obtener una estimación alternativa para la tesorería de la empresa.

2015 2016 2017 2018 2019 2020
BAIT 47,00 66,00 70,00 64,11 68,79 73,48
(+) Amortizaciones 37,00 44,00 42,00 56,42 63,41 70,40
(-) Impuesto teórico 7,48 9,74 7,42 9,29 9,96 10,64
(-) Aumento NOF 25,00 10,00 -3,00 0,77 3,97 3,97
(-) Inversión AF 30,00 70,00 50,00 63,57 57,43 57,43
(=) FCL 21,52 20,26 57,58 46,92 60,84 71,84
(-) Intereses · (1-t) 2,52 4,26 3,58 4,90 5,62 6,26
(-) Reducción deuda -25,00 -37,00 1,00 -30,40 -20,75 -18,21
(=) FCA 44,00 53,00 53,00 72,42 75,97 83,79

Estos pronósticos son en general similares a los obtenidos empleando métodos univariantes. Las diferencias más significativas estriban en los flujos de inversión:

  • El modelo univariante anticipa un crecimiento de las necesidades operativas de fondos (NOF) sustancialmente más grande que el modelo causal. Como señalamos más arriba, el comportamiento de las NOF es en gran medida indeterminado porque depende directa y casi exclusivamente del ciclo de operaciones, que no hemos estudiado en detalle.
  • Por el contrario, el modelo univariante estima que la inversión en activo fijo crecerá más lentamente, en consecuencia también anticipa dotaciones de amortización más pequeñas.

Las proyecciones relativas a la estructura financiera y el servicio de la deuda son virtualmente iguales.